Este documental o como lo bautizó su propio director "thriller gastronómico" cuenta la preparación y posterior participación del cocinero madrileño Jesús Almagro en el Bocuse D’Or, algo así como el campeonato mundial de cocina.
Tiene dos partes claramente diferenciadas. Una primera en la que el protagonista prepara los platos a presentar y una segunda que transcurre en Lyon, lugar donde se celebra el certamen.
Nervios, tensión, dramatismo, angustia, alegria, ilusión, responsabilidad, tristeza, decepción... todo en su justa medida y bien aliñado, como el gazpacho de mi madre.
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