Con tol fresón

Fresa, fresón, frutilla. Comienza la temporada y hay que aprovecharse. Se pueden comer de mil maneras. Al natural, en ensalada, con zumo, en macedonia, en batido, con helado, en sopas frías, como guarnición, con chocolate, salteadas, a la parrilla, estofadas... y con nata claro.

Mi abuela y mi madre las preparaban de una manera muy rica. Solo hay que cortarlas y añadirlas unos 100g de azúcar y un chorrito pequeño de vinagre (media cucharada pequeña) por cada kilo de fresón. Dejarlo en la nevera hasta el día siguiente y las encontrareis bañadas por un néctar absolutamente delicioso. Acompañarlas con una bola de helado de vainilla... a flipar.

Otra sugerencia. Preparad un gazpacho como lo soléis hacer vosotros en casa. Eso si, sustituid el tomate por fresones bien maduros. Vais a ver que resultado tan sorprendente. Gazpacho de fresón.